El robo de dinero y objetos de valor, además de una tremenda paliza sufrieron ayer el popular cumbiambero Víctor Yaipén y su hijo Giancarlo, director e integrante de la orquesta "Candela" de Monsefú, al ser asaltados por una banda de pandilleros cuando se retiraban de un evento benéfico en apoyo al cantante reggaetonero Mc Francia, quien atraviesa momentos difíciles a causa de la diabetes.
El hecho ocurrió cerca de las 5 de la mañana de ayer cuando Víctor Yaipén Uypán y su hijo Giancarlo abandonaban la discoteca Dreams House, en la cuadra 15 de la avenida La Marina. Todo comenzó cuando Giancarlo fue abordado por una mujer desconocida , que en cuestión de segundos se lanzó a quitarle el teléfono celular. Cuando intentó recuperarlo, apareció un grupo de unos 15 pandilleros, entre hombres y mujeres, que lo tiraron al suelo y le propinaron golpes y patadas por todo el cuerpo. Al percatarse del atraco, y sin pensarlo dos veces, Víctor Yaipén corrió hacia su hijo para intentar auxiliarlo, sin importarle que se enfrentaba a una pandilla de salvajes, algunos de los cuales portaban pistolas y navajas. Giancarlo Yaipén mencionó que en ese momento el personal de seguridad se encontraba dentro de la discoteca y el vehículo de la orquesta varias cuadras más allá, es decir estaban prácticamente solos, lo que fue bien aprovechado por los delincuentes. Fue Yaipén padre quien llevó la peor parte, pues terminó sangrando por la nariz con el tabique fracturado, además de contusiones en varias partes del cuerpo. Padre e hijo fueron trasladados a la clínica Centenario Peruano Japonés, Pueblo Libre, donde fueron atendidos de emergencia. Giancarlo sólo presentaba moretones y algunos rasguños, por lo que abandonó la clínica antes que su progenitor. Pasado el mediodía, después de varias horas de ser sometido a una serie de exámenes y radiografías, Yaipén padre abandonó el nosocomio en silla de ruedas y con un parche en la nariz, además de otros en sus brazos y manos. Visiblemente adolorido, Víctor Yaipén declaró a la prensa a su salida de la clínica e indicó que los delincuentes se llevaron mil 500 soles de la billetera de su hijo, su cadena, relojes y teléfonos celulares. Informó que el médico le ha ordenado tres días de descanso y hoy deberá regresar a la clínica para un chequeo del tabique.
El hecho ocurrió cerca de las 5 de la mañana de ayer cuando Víctor Yaipén Uypán y su hijo Giancarlo abandonaban la discoteca Dreams House, en la cuadra 15 de la avenida La Marina. Todo comenzó cuando Giancarlo fue abordado por una mujer desconocida , que en cuestión de segundos se lanzó a quitarle el teléfono celular. Cuando intentó recuperarlo, apareció un grupo de unos 15 pandilleros, entre hombres y mujeres, que lo tiraron al suelo y le propinaron golpes y patadas por todo el cuerpo. Al percatarse del atraco, y sin pensarlo dos veces, Víctor Yaipén corrió hacia su hijo para intentar auxiliarlo, sin importarle que se enfrentaba a una pandilla de salvajes, algunos de los cuales portaban pistolas y navajas. Giancarlo Yaipén mencionó que en ese momento el personal de seguridad se encontraba dentro de la discoteca y el vehículo de la orquesta varias cuadras más allá, es decir estaban prácticamente solos, lo que fue bien aprovechado por los delincuentes. Fue Yaipén padre quien llevó la peor parte, pues terminó sangrando por la nariz con el tabique fracturado, además de contusiones en varias partes del cuerpo. Padre e hijo fueron trasladados a la clínica Centenario Peruano Japonés, Pueblo Libre, donde fueron atendidos de emergencia. Giancarlo sólo presentaba moretones y algunos rasguños, por lo que abandonó la clínica antes que su progenitor. Pasado el mediodía, después de varias horas de ser sometido a una serie de exámenes y radiografías, Yaipén padre abandonó el nosocomio en silla de ruedas y con un parche en la nariz, además de otros en sus brazos y manos. Visiblemente adolorido, Víctor Yaipén declaró a la prensa a su salida de la clínica e indicó que los delincuentes se llevaron mil 500 soles de la billetera de su hijo, su cadena, relojes y teléfonos celulares. Informó que el médico le ha ordenado tres días de descanso y hoy deberá regresar a la clínica para un chequeo del tabique.
Algo más : A diferencia de su hijo, Yaipén padre sí alcanzó a ver cerca del lugar a un patrullero que, sin embargo, no hizo nada por defenderlos. Por ello, pidió sanción para los policías.